¿Se ha planteado alguna vez comprar una vivienda para ponerla en alquiler? Si es así, sepa que ahora es un buen momento para hacerlo, pues es más rentable que hace una década, según un estudio publicado por el portal inmobiliario, Idealista. La rentabilidad bruta de la vivienda es ahora del 7,1% frente al 5,3% que marcaba en el tercer trimestre de 2012.
La mayor parte de capitales de provincia registran está subida de la rentabilidad, a excepción de Madrid cuya tasa se situaba en el 5% y ha bajado hasta el 4,9% actual o Palma de Mallorca del 4,8% en 2012 al 4,4% en 2022, porcentajes ligeramente más bajos. De este modo, si comparamos diferentes capitales, vemos como Murcia ha incrementado la tasa del 5,4% hasta el 8,8%, Huelva del 4,8% al 7,7%; Lugo del 3,3% al 6,2% o Castellón del 4,1% al 6,8%, se han llevado las mayores subidas. Una subida más moderada se ha producido en grandes capitales como Valencia del 6% al 6,1%, Bilbao del 4,8% al 5%, o Barcelona del 4,7% al 5,2%.
Por otro lado, si estos datos los comparamos con el tercer trimestre de 2017, podemos apreciar como la rentabilidad en las distintas ciudades desciende muy levemente del 7,2% al 7,1% actual.
¿Cómo calcular la rentabilidad de la inversión del alquiler?
La rentabilidad bruta de la compra de una vivienda, por tanto, se ha revalorizado y puede ser que un comprador de un inmueble vea como valor refugio invertir en una vivienda que le aporte una rentabilidad superior a otras opciones que pueda encontrar en el mercado. Pero también sepa que el retorno de la inversión suele ser a largo plazo y por eso debe conocer las ventajas e inconvenientes a la hora de planificar la compra de vivienda para destinarla al alquiler.
El comprador o futuro propietario, contará con unos ingresos mensuales procedentes de ese alquiler, pero debemos calcular los gastos fijos, posibles reformas, gastos derivados de la compraventa o mantenimiento. Calcular la rentabilidad es una de las primeras cosas que debemos hacer antes de pasar a realizar cualquier operación de compraventa.
Rentabilidad = ingresos netos de alquiler/precio vivienda x 100
Si a la renta anual del alquiler le descontamos los gastos fijos de mantenimiento y dividimos entre la inversión inicial y multiplicamos por 100, obtendremos el valor de la vivienda a lo que debemos añadir la revalorización (o pérdida si bajase el precio en el mercado).
Estos son algunos puntos a tener en cuenta en caso de seguir adelante con la compra de la vivienda para alquilar:
- Buscar una vivienda que requiera la mínima reforma.
- Escoger una ubicación en auge, ya hemos hablado de las ciudades con mayor rentabilidad en este momento.
- La opción de alquilar por habitaciones. Genera mayor coste, pero podría ser más rentable.
- Que la vivienda cuenta con zonas comunes, tenga terraza, supermercados, líneas de transporte cercanos… todo ello será un plus.
Por lo tanto, invertir en una vivienda para alquilarla después continúa siendo una opción elegida por aquellos quienes quieren obtener rentabilidad sin asumir grandes riesgos.
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