Madrid comienza a destacar en las ayudas públicas inmobiliarias. A día de hoy, la insistencia de expertos y profesionales, así como de gran parte del público, en la necesidad ineludible de ayudas públicas en el sector inmobiliario, no es algo arbitrario ni casual.
Tanto para contribuir a reflotar la economía del sector, maltrecha por un año de desventuras y sinsabores, como para ayudar a las muchas personas que aspiran a una vivienda sin poder conseguirla, por las muchas estrecheces que sufren, y que la pandemia, según los casos, ha desencadenado o ha agravado.
Es por eso que algunas administraciones, sobre todo a nivel municipal y autonómico, se están poniendo en acción desde marzo de 2020 en adelante. Es el caso de la madrileña Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS), la empresa pública municipal del sector inmobiliario en la capital de España.
La EMVS está ofreciendo amplias ayudas de hasta 900 euros para las personas que estén buscando viviendas en alquiler. El objetivo primordial y confeso de este programa de ayudas dotado con 30 millones de euros es, según el alcalde Martínez-Almeida, proporcionar viviendas “a la clase media”.
Es decir, a aquellos cuya renta es más elevada que la de los destinatarios de las viviendas sociales (clase obrera, colectivos en riesgo de exclusión social) pero que están conociendo dificultades económicas por el pago de los todavía elevados alquileres en la capital.
Los requisitos de las ayudas públicas y el Plan Municipal
Pero ¿cuáles son los requisitos para optar a tales ayudas en el momento presente? Veámoslos:
– El primer requisito indispensable es hallarse empadronado en la capital española durante al menos los cinco años previos a la solicitud de las ayudas.
– Se exige además un determinado nivel de ingresos brutos anuales: entre 3 y 7,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), es decir, entre 32.200 y 88.200 euros anuales, lo que acaba de identificar estas ayudas como dirigidas a la llamada “clase media”.
– Esta ayuda para el arrendamiento no podrá superar los 900 euros. Tampoco ningún arrendatario habrá de pagar más del 30% de los ingresos netos del conjunto de la unidad familiar. Sin embargo, también se exige que el inquilino pague como mínimo 450 euros mensuales, nunca menos.
Además, el Ayuntamiento capitalino llevará la gestión del alquiler durante todo el periodo de duración de las ayudas, y anticipará el coste de las reformas necesarias a un 0% de interés.
Estas ayudas se integran en el denominado Plan Integral de Alquiler Municipal, que consta de los siguientes programas específicos:
– Programa Reviva. Ofrece a los propietarios con viviendas vacías que las cedan en régimen de usufructo a la EMVS para que así esta les garantice unas condiciones de pago del arrendamiento durante todo el periodo de duración del contrato.
– El Bono Vivienda, cuyas características ya hemos visto en detalle.
– Programa conFIANZA Joven. Pretende garantizar el acceso a los alquileres a los menores de 35 años de edad. Se trata de anticipar el pago de la fianza de arrendamiento a los jóvenes que se inscriban en el Programa de intermediación ALMA (Alquila Madrid).
Este programa, cuyos inicios tuvieron lugar en abril de 2017, se trata de un programa de mediación entre quienes ofrecen una vivienda en arriendo (o la poseen y están en condiciones de ofrecerla) y quienes la necesitan. En estos cuatro últimos años, la EMVS ha mediado en un casi 600 contratos. Fuentes oficiales municipales aseguran que en breve el programa cambiará de denominación y ampliará sus ventajas.