Rebajar la factura del gas es una de las prioridades de cualquier hogar tras la escalada de precios de la energía provocado por el conflicto ruso-ucraniano. Ahorrar en calefacción este invierno se ha convertido en una necesidad para evitar el impacto de esta subida en casa.
En cierto modo, el consumo de calefacción, y agua caliente, durante el invierno se incrementa considerablemente llegando a representar más del 60% del consumo energético en los hogares, según datos del IDAE. De este porcentaje, un 46% va destinado a calefacción y un 20% a agua caliente, por lo que un uso eficiente significa un ahorro en ambos suministros energéticos.
Las medidas proclamadas por el Gobierno para rebajar el IVA del gas aplicando un 5% y no el 21% como venía siendo hasta la fecha, darán un respiro a los hogares españoles, por lo menos hasta fin de 2022 y que beneficiará a todos los suministros de gas natural, incluidos los destinados a las calderas de las comunidades de vecinos.
Pero, si esto es insuficiente y queremos ahorrar en calefacción durante estos meses más fríos del año, podemos tener en cuenta una serie de recomendaciones con las que evitar las elevadas facturas energéticas.
Algunas medidas para ahorrar en calefacción
– Buen mantenimiento de los equipos: las revisiones e inspecciones periódicas son fundamentales para garantizar el buen rendimiento de nuestros equipos de calefacción. Purgar los radiadores o limpiar los filtros son acciones que no debemos pasar por alto.
– Revisar la tarifa de gas: en el mercado puedes encontrar tarifas que se adapten mejor a tus necesidades y con las que puedes conseguir un ahorro nada despreciable en tu factura. Revisa tu tarifa contratada y compara con otras compañías.
– Mantener una temperatura adecuada: 21 grados es la temperatura idónea a la que debes poner el termostato para que tu hogar disfrute de confort. Subir el termostato incrementa el consumo de energía, haciendo un flaco favor a tu factura a fin de mes. Por lo tanto, ajusta la temperatura interior sin que tu casa se convierta en verano.
– Apagar la calefacción de noche: por la noche, puedes apagar la calefacción o radiadores y ahorrar en tu factura. Siempre y cuando no haga demasiado frío, es mejor permanecer más abrigados en la cama que tener la calefacción puesta.
– Revisar el aislamiento: comprobar que puertas y ventanas cierran correctamente es imprescindible para ahorrar en calefacción, ya que gran parte del calor se pierde a través de ellas. Un mal aislamiento provoca alrededor del 25% de pérdida de calor, por lo que revisar los sistemas de aislamiento, así como realizar alguna reforma para evitarlo, será una buena inversión.
– Ventilar la vivienda: abrir las ventanas durante 15-20 minutos por las mañanas, será suficiente para ventila nuestra casa y evitar la pérdida de calor excesiva.
– No cubrir los radiadores: hay costumbres como colocar la ropa húmeda encima del radiador para secar o colocar un mueble que lo tape, hará que el radiador necesite más energía para calentar la habitación donde está colocado, por lo que el gasto energético también será mayor al igual que el incremento de la factura.
Como podemos comprobar, ahorrar en calefacción este invierno también depende de factores que podemos controlar nosotros mismos y que se traducen en hacer un buen uso de los sistemas de calefacción de nuestro hogar y la manera de hacerlos más eficientes.